
Lo más probable es que fuese de origen extra-terrestre, aunque también se especuló con que venía de otra dimensión o tal vez del mundo fantástico de los duendes. Nunca se supieron sus verdaderas intenciones.
Era del tamaño de una esfera de Navidad, y tenía una sonrisa dulce y agradable que enamoraba a todas las mujeres sin excepción, solteras, viudas o casadas. Volaba discretamente, y siempre se presentaba cuando las damas estaban solas. Jamás se dejó ver por hombre alguno, ni apareció en fotos o videos.
Era tan agradable que ninguna pudo nunca evitar el devolverle la sonrisa y acariciarla, sin saber que inmediatamente, tras de un cortísimo pero espléndido orgasmo al contacto, ellas quedaban embarazadas de la esfera.
En cuestión de minutos, las mujeres empezaban a desarrollar vientre, y al día siguiente tenían que emplear ropa holgada…y a dar extrañas explicaciones que ningún novio, amante o marido podía creer.
A los tres meses, las mujeres preñadas por ella daban a luz un globo rojo lleno de agua que reventaba inmediatamente, sin dejar ningún rastro más allá de las sábanas o la ropa empapadas.
Un día la esfera desapareció para siempre sin que nadie hubiese logrado explicar el extraño fenómeno.
La misteriosa criatura dejó millones de corazones rotos en el planeta Tierra.