¿De qué materia están
hechas las musas?
Las musas son casi
insustanciales. Atraviesan paredes, piel y huesos sin mayor problema.
Disfrutan, en su travesía, de la baja
densidad del cerebro humano, por lo que les encanta atravesarlo. Y al hacerlo
suelen dejar su huella. No es tan fácil explicar cómo generan, en algunos
casos, esa chispa que los humanos llamamos “inspiración”. Esto lo aclararemos
más adelante.
La insustancialidad de
las musas tiene una excepción, misma que descubrimos al probar su permeabilidad
en distintos materiales: el talco perfumado.
Si rociamos el
ambiente en que se desplazan las musas con algún talco muy fino y perfumado (de
la calidad que se emplea para los bebés), éstas quedan impregnadas de él, y
entonces es posible percibirlas. Nosotros usamos la técnica fotográfica de alta
resolución digital sobre algunas musas ya talqueadas, y pudimos obtener una clara
imagen de ellas.
¿De qué tamaño son?
Hay de varios tamaños,
pero casi todas caben en la palma de una mano (humana). Pero hay que decir que
la potencia inspiradora de las musas poco tiene que ver con su talla. Tenemos
casos de musas del tamaño de un dedo
meñique que han generado ideas estupendas. Aquella que inspiró a Bill Gates
cuando generó Words, podría extenderse cómodamente en un pétalo de rosa.
No hay comentarios:
Publicar un comentario